La educación sexual es un derecho de todos que inicia con el nacimiento y dura toda la vida. En la primera infancia, la calidad de la misma depende del tipo de relación que se forme entre el niño o la niña y sus padres, maestros o tutores. Conforme la edad de los pequeños avanza se trata de orientarlos de tal forma que transiten el camino de su sexualidad de una manera amorosa, segura y responsable.
Sabemos que hoy en día existe una mayor conciencia acerca de la importancia de que niños y jóvenes tengan acceso a información basada en el conocimiento científico que les permita tomar las decisiones adecuadas para ejercer una sexualidad sana. Sin embargo, la manera en que los chicos integren esta información a sus vidas, dependerá en gran medida del apoyo que reciban por parte de sus mayores en casa, así como de la posibilidad que tengan de compartir sus dudas, miedos e inseguridades respecto al tema sin ser castigados, etiquetados o enjuiciados.
Las estadísticas nos demuestran que conforme avanza el tiempo los chicos están más receptivos a conducirse de una manera responsable en cuanto a evitar Infecciones de Transmisión Sexual y embarazos no deseados; sin embargo, como se muestra en la primera gráfica que a continuación se presenta, también inician su vida sexual a edades más tempranas. En conclusión la educación sexual se torna cada día más necesaria.
A continuación los resultados de la Encuesta Nacional de la Juventud 2010 realizada por el Instituto Mexicano de la Juventud (IMJUVE), en su apartado de sexualidad :